El Baño

Analizaré ahora la distribución del baño en conjunto. Como he dicho en otras ocasiones, el baño es un espacio particular de la casa: por un lado, la mayoría de los elementos del baño están fijos, por lo que la decisión inicial de su colocación no es en absoluto trivial, permanecerá durante muchos años (quizás toda la existencia de la vivienda), y condicionará el uso que se le dé a ese espacio. Por otro lado es el lugar mas íntimo de la casa y el usuario se encontrará en las circunstancias mas vulnerables: estará desnudo, tendrá los pantalones bajados hasta los tobillos, estará descalzo, mojado, etc. Incluso puede que sea compartido por dos personas en esas mismas condiciones.

Y como siempre, analizaré un caso concreto: el del baño que me toca utilizar. Se trata de un espacio amplio, de 1,92m x 3,10m. En uno de sus lados menores se encuentra la puerta, centrada en la pared, y en el otro hay una ventana de 1,20m. En una de las paredes mayores sobresale una columna, y arriba también una viga. Visto desde la puerta, a lo largo de todo el lado derecho se han colocado el inodoro, lavabo y bidet, y al lado izquierdo se ha colocado un pequeño mueble aparador, tohallero, botiquín y bañera. Mas o menos es algo así:

planta baño

Como podéis ver los elementos no se han ubicado de forma aleatoria, se ha intentado aplicar un criterio de diseño, pero el mas primitivo: la mayor simetría posible. No es que haya algo malo en la simetría en sí (aunque incluso en una composición en dos dimensiones suele ser una idea pobre y poco creativa), sino que no se ha analizado en absoluto el uso del espacio y de los objetos, ni se ha tenido en cuenta el desarrollo del usuario dentro de ese espacio.

1º) El bidet se ha ubicado totalmente separado del retrete, casi dos metros. ¡El usuario que se levanta de éste, con las piernas desnudas y los pantalones en los tobillos, tendrá que caminar con dificultad hasta el otro extremo del baño, mas o menos cinco pasos, para sentarse en el bidet! No tiene ningún sentido. Y al acabar de limpiarse en el bidet, si no tiene una toalla a mano y quiere utilizar papel, tendrá que hacer el recorrido opuesto, hasta el portarrollo que está junto a la puerta.

2º) La toalla. No se ha colocado toallero a los lados del lavatorio (quizás porque allí han puesto los otros sanitarios), y en cambio se ha puesto en la pared opuesta, justo frente al retrete, al lado de la columna. Luego de lavarse las manos, el usuario debe girarse, salpicando todo el suelo, hasta la toalla. Está en el peor lugar posible. No hay toallero para la ducha ni para el bidet.

3º) La puerta. Como se puede apreciar en el boceto, el arco que forma la puerta al abrirse pasa a pocos centímetros del retrete. Esto (como todo lo demás) hay que analizarlo sin prejuicios. El usuario puede querer abrir la puerta mientras está sentado en el retrete, o puede querer cerrarla despúes de sentarse, o alguien puede abrir la puerta mientras está sentado. En cualquier caso, o recibirá un golpe en la rodilla izquierda o tendrá que girarse para dejar pasar la puerta. Usualmente los baños no tienen tanto espacio y es inevitable, pero aquí se trata de casi 6 metros cuadrados. No había ninguna necesidad de provocar esa situación. Pero la puerta sencillamente se ha colocado (siguiendo el criterio simétrico) centrada en la pared, dejando además un espacio vacío detrás, que ha sido ocupado posteriormente con un pequeño armario de cajones.

4º) Hay un botiquín sobre el toallero; de esos con espejo y tres puertitas, que suelen estar sobre el lavatorio, pues aquí lo han colocado detrás.

Podría seguir enumerando errores, pero por el momento lo dejaremos ahí.

Luego, ¿Cómo se podría diseñar correctamente el baño? ¿Dónde y cómo deben colocarse los sanitarios para optimizar su usabilidad? Hay muchísimas combinaciones posibles. Primero hay que analizar el uso que se le dará. Por ejemplo:

a) El uso mas sencillo puede ser el de lavarse las manos. El usuario entra, se moja, se enjabona las manos. Aquí es conveniente que la jabonera esté en el lavatorio o encima de él, para que el agua jabonosa que se escurra y se salpique no vaya a parar al suelo. Al acabar cogerá una toalla para secarse, y tiene que estar cerca; puede ser a un lado, a veces se coloca justo delante y debajo del lavatorio, pero debe estar al alcance de la mano sin moverse del sitio. Imaginemos que se ha lavado la cara con jabón y no puede abrir los ojos. Está ciego, chorrea agua por el mentón, tiene que poder encontrar la toalla con solo estirar una mano, y no salir palpando las paredes con las manos mojadas para encontrarla en el otro extremo del baño. Algo similar se puede decir del botiquín.

b) Otro caso: El usuario entra a hacer sus necesidades fisiológicas. Acaba, se limpia con papel y pasa al bidet donde se limpia con agua, se seca con una toalla, y de no tenerla, puede secarse con papel. De aquí deducimos que junto al bidet debería haber un toallero, y probablemente una jabonera, aunque para esto puede ser suficiente con las concavidades a modo de jabonera que ya traen junto al grifo, aunque estas no siempre están bien diseñadas y el jabón acaba cayendo dentro del bidet. Esto ya lo he descrito: el bidet tiene que estar al lado del retrete, para que se pueda alcanzar con un solo paso lateral, sin necesidad de incorporarse completamente. De ser imposible, puede estar delante, de manera que el usuario lo alcance girando sobre sus pies. Lo que no tiene ningún sentido es que se instale del otro lado del baño, a casi dos metros, obligando al usuario a levantarse y caminar. Al acabar de usar el bidet se lavará las manos en el lavatorio, con lo que volvemos al punto a)

c) Caso de uso de la ducha: El usuario necesitará tener a mano el jabón y el shampoo al menos, además de otros posibles elementos de higiene; de haber un estante para ellos, no debería quedar bajo el chorro directo de la ducha o demasiado cerca. Al acabar de ducharse necesitará una toalla, por lo que debería haber un toallero a la distancia de un brazo extendido de la bañera, que se pueda alcanzar manteniendo el cuerpo vertical sin tener que «estirarse» para nada, lo que podría provocar un accidente. Si está demasiado lejos, el usuario tendrá que salir de la ducha completamente mojado, y mojará todo el baño.

Como dije antes, el uso debe analizarse sin prejuicios. Eso incluye la privacidad. Si bien el baño es un espacio de uso íntimo, cada familia administra su intimidad como le place. Por lo tanto, es probable que lo utilicen simultáneamente mas de una persona.