Leo en ésta noticia que un joven perturbado mental (loco), se coló en una comisaría de los Mossos d’Escuadra, que es la policía catalana, robó un uniforme y salió así vestido a patrullar a la calle. De novela. Los responsables de seguridad de las fuerzas de seguridad tendrán que dar una o dos explicaciones, supongo.
Si lo pensamos bien, el chico se puso en una esquina a dirigir el tráfico. No llevaba porra ni escudo, ni intentó pegarle a nadie. Quizás en algún momento de la historia se confundieron los psiquiátricos y los cuarteles, y nunca nos dimos cuenta.
Espero que el peso de la ley no caiga con mas fuerza contra este chico que contra aquéllos que propinaban (¿propinan?) terribles palizas en esas dependencias.
#1 by migue on 23/06/2008 - 11:49
Debe de ser un espisodio común. Muchos de los agentes que uno ve a diario «apatrullando la ciudad» no deben estar muy cuerdos. Cosas que pasan cuando le das a un imbécil una porra y un silbato.
#2 by pepe on 24/06/2008 - 23:37
Qué bonita parábola, Pereyra. ¡¡Cuanta sabiduría concentrada en forma de noticia breve!! Me ha encantado, de verdad. Yo cuando tenía siete años quería ser policia. Para mi eso encarnaba el Bien. El chico que cuentas probablemente tenga la edad mental de un crio pequeño. A los niños les encanta difrazarse.
La realidad es cuando de la imagen que tienes de la policia de pequeño y lo que es la pasma va un abismo. Es cuando se confunden psiquiatricos con carceles, comisarias y cuarteles. Un saludo y muchas graciasªªª
#3 by pereyra on 26/06/2008 - 1:54
Qué le vamos a hacer, Pepe! Quizás algún día las cosas vuelvan a tener el nombre que les corresponde